En una exposición ante las autoridades de dichos organismos en Washington, el gerente general de IFPI Chile, Francisco Nieto, explicó que el 50% del mercado de la música en nuestro país es ilegal, lo que además de dañar a esta industria cultural, va contra los tratados firmados por Chile.
Nuestro país ratificó los tratados de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) de 1996 para la protección del derecho de autor y los derechos conexos en Internet (WCT y WPPT) y suscribió un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos incluyendo un extenso capítulo de Propiedad Intelectual. Ninguno de ellos se está cumpliendo a cabalidad. Es por eso que hemos venido a Washington a contactarnos con los más altos representantes del gobierno de Estados Unidos para que tengan conocimiento de primera fuente de la situación actual que se vive en Chile en materia de la débil protección que en la práctica tienen los derechos de autor y los derechos conexos. Del mismo modo, para que consideren hacer presente a nuestro gobierno que no basta con firmar tratados, sino que hay que cumplirlos efectivamente, explicó el ejecutivo.
A pesar que como consecuencia de estos tratados, en noviembre de 2003 Chile hizo algunas reformas a su Ley de Propiedad Intelectual (Nº 17.336 de Octubre de 1970) para adecuarla a las nuevas exigencias planteadas, entre las que destacan el aumento del término de protección para las obras, interpretaciones y fonogramas a 70 años y la implementación de los derechos exclusivos para el control de las utilizaciones interactivas en la Internet -llamados derechos exclusivos de puesta a disposición del publico por medios interactivos- todo ello ha demostrado que no fue suficiente para atacar de raíz el problema de la expansión de la piratería.
Sin embargo, lo obtenido hasta ahora con el trámite parlamentario del proyecto antipiratería que data de comienzos del año pasado y recientemente informado por la comisión de Economía de la Cámara de Diputados, está ofreciendo una propuesta de modificar el texto vigente. Esta propuesta generó que el lunes 28 de marzo recién pasado diversas organizaciones le pidieran al Gobierno expresamente que se procediera a retirar el proyecto del Congreso. Esto, pues más que mejorar el escenario actual para combatir la piratería, lo complica al rebajar las penas. Así, quedaría abierta la posibilidad de despenalizar un delito y se asumiría un camino que abiertamente va en sentido contrario a lo que se ha firmado por nuestro país, tanto con los Estados Unidos como con la Unión Europea, en materia de protección de derechos de autor y conexos.
La idea de nuestra visita es que Estados Unidos advierta que Chile no está protegiendo ni fomentando la inversión en las industrias culturales. Esto, debido a que con la ausencia de sanciones disuasivas en materia de infracciones a los derechos de autor y conexos no es un incentivo para llegar a invertir al país o para mantener dichas inversiones sin la existencia de las más mínimas garantías. A su vez, consideramos que resulta necesario que en cada reunión a nivel oficial, tanto en Chile como en EE.UU., estos temas sean tratados por las autoridades, ampliamente difundido y que el embajador estadounidense en Chile tome parte en la defensa de los derechos de los creadores, artistas e industrias culturales de su país, agregó Nieto.
En tanto, otro de los fines que se persiguen con este viaje de las autoridades de IFPI Chile es que cada una de estas agencias por separado tenga claridad absoluta respecto de la real situación sobre los derechos de autor y conexos en Chile e informe debidamente a las comisiones de trabajo del Congreso estadounidense. Con esto, se espera coordinar acciones a través de las agencias gubernamentales estadounidenses para que hagan saber su preocupación e interés en que se hagan los debidos cambios por las autoridades y parlamentarios chilenos.
