Según fuentes conocedoras de la situación, Microsoft está en conversaciones para invertir 10.000 millones de dólares en el propietario de ChatGPT, el enormemente popular programa que ha deleitado tanto a usuarios ocasionales como a investigadores de inteligencia artificial desde que se presentó su última versión el mes pasado.
Según personas con información privilegiada, la inyección de capital, en la que también participarían otras empresas de capital riesgo, valoraría a OpenAI, la compañía creadora de ChatGPT, en 29.000 millones de dólares, incluida la nueva inversión. Aunque no está claro si el acuerdo se ha cerrado, los documentos distribuidos a los posibles inversores en las últimas semanas en los que se explicaban sus términos indicaban una fecha de cierre prevista para finales de 2022.
Según informa Semafor, la inversión de Microsoft formaría parte de un complejo acuerdo en el que la empresa recibiría el 75% de los ingresos de OpenAI hasta que recuperara su inversión.
Cuando se alcance ese nivel, la estructura revertirá a una que represente la propiedad de OpenAI, con Microsoft poseyendo el 49%, otros inversores el 49% y la matriz sin ánimo de lucro de OpenAI el 2%. También hay un tope de beneficios que varía según el grupo inversor, algo inusual en las operaciones de riesgo, en las que los inversores aspiran a ganar 20 ó 30 veces su dinero. Los términos y la cuantía de la inversión podrían alterarse, y el acuerdo podría fracasar. Microsoft y OpenAI no respondieron a las solicitudes de comentarios de Semafor.
Paralelamente, el Wall Street Journal escribe que ChatGPT está ofreciendo a su personal y a los primeros inversores la posibilidad de vender sus acciones con una valoración de 29.000 millones de dólares. Según The Information, Microsoft está en conversaciones para ampliar su inversión en OpenAI tras invertir 1.000 millones de dólares en efectivo y créditos en la nube en 2019.
El valor de 29.000 millones de dólares es cuantioso para OpenAI, una empresa que aún tiene que definir su estrategia empresarial, y el precio de 10.000 millones de dólares es también cuantioso para los accionistas de Microsoft.
Según Sam Altman, consejero delegado de OpenAI, ChatGPT está perdiendo dinero, ya que cada interacción con su chatbot le cuesta a la empresa unos pocos céntimos en potencia de cálculo.
Más allá de los riesgos y recompensas financieras para Microsoft, el mayor premio es que colaborará con OpenAI para construir la tecnología en Microsoft Cloud, poniendo a Microsoft a la vanguardia de lo que podría ser la tecnología de consumo más importante de la próxima década.
La inversión de 10.000 millones de dólares de Microsoft es una apuesta para que OpenAI se mantenga muy por delante de otras empresas que utilizan los algoritmos de IA que impulsan productos como ChatGPT.
