Durante años, las autoridades suecas han mantenido en secreto el número, e índole, de los ataques cibernéticos realizados contra el país escandinavo. El domingo 8 de enero, la organización de inteligencia sueca FRA reveló los datos, que fueron profusamente referidos por los medios de ese país. Según la entidad, cada año se realizan 100.000 ataques contra la infraestructura sueca. La situación ha llevado al primer ministro de ese país, Stefan Löfven, a proponer al parlamento “una actualización a gran escala de la capacidad de defensa cibernética de Suecia”.
El portavoz de FRA, Fredrik Wallin, declaró a la televisión estatal de ese país (SVT): “en el transcurso de un mes detectamos hasta 10.000 incidencias provenientes de atacantes estatales extranjeros contra objetivos suecos”. Wallin Agregó: “es prácticamente imposible defenderse de atacantes cualificados, cuando están totalmente decididos a intervenir un objetivo específico”.
FRA es uno de los organismos más secretos de Suecia. Consultado por SVT, Wallin dijo que el ciberespionaje contra Suecia “ha estallado” durante el último año, agregando que “es solo un puñado de países que atacan permanentemente objetivos en nuestro país. Sus actividades se concentran en obtener información secreta, o en utilizar recursos informáticos como plataforma de ataque u observación de otros objetivos. Invariablemente, se trata de organizaciones con gran capacidad y recursos”.
“Estamos frente a algunos de los especialistas más avanzados en TI del mundo”, agregó Wallin, a cuyo juicio el país debe robustecer su ciberdefensa. En cuanto al ámbito empresarial, dijo que hay empresas protegidas, y otras cuyos sistemas pueden ser intervenidos sin mayores dificultades por los atacantes. El funcionario no respaldó sus afirmaciones con datos estadísticos.
Consultado por SVT Sobre cómo es posible que estas organizaciones se desentienden de su propia seguridad, Wallin respondió escuetamente: “no siempre entienden la gravedad del problema o la importancia de la seguridad informática”.
