La pregunta cobra más relevancia ahora que Microsoft ha reducido drásticamente su apuesta por el sector móvil, que en su momento compró precisamente a Nokia.
El 13 de julio, el portavoz de Nokia, Robert Morlino, publicó un comentario en el sitio de la empresa, donde aclara la actual situación.
Morlino recuerda que durante 14 años, Nokia fue el mayor fabricante mundial de teléfonos móviles, por lo que la marca es actualmente respetada y recordada en todo el mundo.
En abril de 2014, Nokia vendió su división de dispositivos y servicios a Microsoft. Con ello, Microsoft asumió el control de la formidable capacidad de producción, marketing y distribución que Nokia había desarrollado con el paso de los años. En solo un año, esta estrategia de Microsoft se ha desmoronado y a juicio de un experto demuestra que comprar hardware para obtener una cuota del mercado es un mito en la economía digital.
Morlino escribe que Nokia se concentra actualmente en el “mundo conectado”, mediante su infraestructura para redes, servicios cartográficos, como asimismo desarrollo tecnológico y licencias.
La empresa se plantea reinstalar en el sector móvil su diseño icónico e innovación, aunque en un modelo distinto al anterior. Según Morlino, esto ocurriría mediante la gestión de licencias de tecnologías para otros fabricantes. Es decir, Nokia estudia la posibilidad de encontrar un socio comercial que asuma la producción, ventas, marketing y soporte al cliente.
La empresa de hecho ya hizo un experimento de estas características con su tableta N1, que opera con Android. El producto alcanzó cierta popularidad en China.
Nokia considera entonces encontrar un socio comercial competente, que asuma la producción y distribución de teléfonos móviles, y que pueda trabajar estrechamente con la empresa para conseguir un buen resultado en el mercado.
Con todo, toda iniciativa en este sentido deberá esperar hasta el cuarto trimestre de 2014 debido a una cláusula contenida en el contrato con Microsoft, según la cual Nokia no podrá colocar su marca en teléfonos móviles hasta entonces. Las tabletas no forman parte del acuerdo, lo que hizo posible el producto N1.
