La IA de código abierto amenaza la posición de Google y OpenAI, advierte un insider

El software comúnmente disponible supone una amenaza tanto para Bard de Google como para ChatGPT de OpenAI, según un documento filtrado.

Uno de sus ingenieros ha advertido a Google de que la empresa no está en condiciones de ganar la carrera de la inteligencia artificial y podría perder frente a la tecnología de IA de acceso general.

Un documento de un ingeniero de Google filtrado en Internet y referido por Bloomberg afirma que la empresa ha “mirado mucho por encima del hombro a OpenAI”, en referencia al desarrollador del chatbot ChatGPT.

Sin embargo, el trabajador, quien según Bloomberg sería un ingeniero de software senior, escribió que ninguna de las dos empresas estaba en una posición ganadora. “La incómoda verdad es que no estamos en posición de ganar esta carrera armamentística y OpenAI tampoco. Mientras hemos estado discutiendo, una tercera facción se ha estado comiendo tranquilamente nuestro almuerzo”, escribió el ingeniero.

El ingeniero continuó afirmando que la “tercera facción” que suponía una amenaza competitiva para Google y OpenAI era la comunidad de código abierto.

Los desarrolladores de tecnología de código abierto no se reservan derechos de propiedad y liberan su trabajo para que cualquiera pueda utilizarlo, mejorarlo o adaptarlo como considere oportuno. Ejemplos históricos de trabajo de código abierto son el sistema operativo Linux y LibreOffice, una alternativa a Microsoft Office.

El ingeniero de Google afirmó que los desarrolladores de IA de código abierto “ya nos están tomando la delantera”, y citó ejemplos como las herramientas basadas en un modelo lingüístico de gran tamaño desarrollado por Meta, de Mark Zuckerberg, que la empresa puso a disposición de los usuarios de forma “no comercial” y caso por caso en febrero, pero que se filtró en Internet poco después.

Desde que el modelo LLaMA de Meta se hizo ampliamente accesible, añadía el documento, el umbral de entrada para trabajar en modelos de IA ha descendido “desde el producto total de una gran organización de investigación a una persona, una tarde y un portátil robusto”.

El documento también citaba páginas web repletas de modelos de generación de arte visual de código abierto. En cambio, Chat GPT y el chatbot Bard de Google no comparten ponen sus modelos subyacentes a disposición del público.

“Aunque nuestros modelos aún mantienen una ligera ventaja en términos de calidad, la brecha se está cerrando con asombrosa rapidez. Los modelos de código abierto son más rápidos, más personalizables, más privados y, libra por libra, más capaces”, escribió el trabajador de Google.

El ingeniero continuó advirtiendo que la empresa no tenía “ninguna salsa secreta” y que “nuestra mejor esperanza es aprender de lo que hacen otros fuera de Google y colaborar con ellos”, añadiendo que la gente no pagaría por un modelo de IA restringido cuando “las alternativas gratuitas y sin restricciones son comparables en calidad”.

Ilustración vía Canva


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