Después de haber sido derrotada en los tribunales estadounidenses por las industrias cinematográfica y discográfica, Grokster debió cerrar sus puertas. Además, debió pagar una indemnización de 50 millones de dólares a los demandantes.
Fuerte advertencia
El sitio de Grokster es usado ahora para intimidar a quienes intentan acceder al servicio. A continuación se transcribe una traducción del texto en inglés con que son recibidos los visitantes:
La Corte Suprema de Estados Unidos confirmó unánimemente la ilegalidad de este servicio para intercambiar material con derechos reservados. La copia de material cinematográfico y discográfico con copyright usando servicios de intercambio uno-a-uno es ilegal. Los titulares de los derechos buscarán sancionar a los infractores. Actualmente existen servicios legales para descargar música y películas. Este servicio no es uno de ellos.
Esta publicación visitó Grokster para confirmar la información. Al final del párrafo anterior, pudimos constatar la arrogancia con que ocasionalmente pueden actuar la industria discográfica y cinematográfica:
SU DIRECCIÓN IP ES (nuestra dirección IP) Y HA SIDO ANOTADA EN NUESTRO REGISTRO DE EVENTOS. NO CREA QUE NO LE PODEMOS ATRAPAR. USTED NO ES ANÓNIMO.
Ante tal intimidación, sólo podemos concluir que las industrias cinematográfica y discográfica parten de la base que cualquier visitante a tales sitios es un potencial delincuente e insultan gratuitamente a medios de comunicación, investigadores y usuarios legítimos de servicios P2P, como por ejemplo artistas emergentes, que recurren a estos servicios para difundir sus creaciones.
Sugerimos leer el siguiente artículo nuestro, publicado en 2003: El alarmismo de IFPI y las discográficas
