Roger Weed, vicepresidente de productos en Microsoft, comentó a Computer Reseller News que la presencia de XP entre la base mundial instalada de 250 millones de unidades de Windows es “bastante reducida”, por lo que Microsoft intentará realizar un re-lanzamiento del producto. La compañía ya habría destinado un millón de dólares para una investigación sobre la forma en que se puede generar interés entre los compradores del sistema operativo.
Según CRN, el problema radica en la falta de demanda del producto. Un distribuidor relató a la publicación que hasta ahora no ha tenido un solo cliente que deseara actualizar desde una versión anterior de Windows a Windows XP. El interés es especialmente bajo por migrar desde Windows 2000 a Windows XP. En opinión de los clientes, la diferencia entre ambos sistemas es simplemente demasiado reducida como para justificar una actualización.
