La autorización permite a Amazon probar los siguientes tres aspectos fundamentales para la eventual implantación comercial del servicio de entregas mediante drones:
• Entrega en sectores rurales y suburbanos
• Desempeño de sensores que aseguren que los drones pueden detectar y eludir obstáculos
• Determinar la factibilidad de que un solo individuo opere múltiples drones automatizados
En un comunicado, Paul Misener, vicepresidente de Amazon a cargo de políticas de innovación global, explicó que la autorización del gobierno británico beneficiará a los consumidores, a la industria y a la sociedad. El ejecutivo menciona que la empresa ha estado abocada a las investigaciones y desarrollo de su proyecto PrimeAir “durante bastante tiempo”.
Amazon, empresa estadounidense, recalca que la autorización del Reino Unido fortalece su presencia en ese país europeo, a la vez que acerca a la empresa a su objetivo de utilizar drones para la entrega de mercancías a clientes británicos dentro de un plazo máximo de 30 minutos.
La autoridad de aeronáutica civil del Reino Unido (CAA), participará en todas las etapas de las pruebas, y aportará las experiencias adquiridas durante el proceso a organismos encargados de diseñar políticas y regulaciones sobre la materia.
Tim Johnson, director de políticas en CAA, declaró: “nos interesa habilitar la innovación proveniente de los avances en tecnología de drones, mediante la integración de estos vehículos en el sistema general de aviación, partiendo de la base de su operación segura”.
La aprobación británica es similar a una autorización otorgada en 2015 por la entidad estadounidense US Federal Aviation Authority.
en 2014, Amazon fue fuertemente cuestionada por haber planeado una estrategia de entrega de paquetes en la india, sin siquiera haber consultado a la Dirección General de Aeronáutica Civil de ese país.
