La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) de EEUU ha resuelto imponer a los proveedores de VoIP (Voice over IP), la obligación de incorporar soporte completo para el número de emergencia 911. Esto implica que la información del sistema local también deberá ser transferida, de forma que la central de emergencias pueda establecer inmediatamente desde qué dirección física procede la llamada.
Con el fin de que lo anterior sea técnicamente posible, los proveedores de VoIP deberán aliarse con sus competidores – los operadores telefónicos tradicionales que, por cierto, no les asistirán gratuitamente.
Esto implica que el precio de la telefonía IP aumentará considerablemente, en la medida que las nuevas reglas de la FCC vayan siendo implantadas. La entidad ha dado a los operadores de VoIP plazo hasta octubre, mes en que todos deberán haber incorporado soporte completo para las llamadas a los números de emergencia y para la identificación de llamadas, escribe The Register.
