En las últimas semanas, Facebook ha experimentado un serio revés de imagen debido a las revelaciones y denuncias sobre la empresa Cambridge Analytica, que habría sido utilizada para manipular las últimas elecciones estadounidenses, en favor del entonces candidato Donald Trump. Como parte de sus esfuerzos por recuperar la confianza perdida de los usuarios y aplacar las críticas, la empresa ha anunciado nuevas medidas de protección de la privacidad y de seguridad.
Una de las principales funciones anunciadas por la empresa es la opción denominada “Clear History” o “ borrar historial”, que permite a los usuarios ver qué páginas y aplicaciones comparten información e interactúan con Facebook cuando están siendo utilizadas. Este tipo de actividades carece de toda transparencia y es imperceptible para el usuario.
Aparte de visualizar su información, el usuario también tiene la posibilidad de borrarla de su cuenta con el fin de poner fin al flujo de datos hacia el exterior. Asimismo, también es posible desactivar la función de Facebook que almacena la información recibida de aplicaciones y servicios online.
Según Facebook, al borrar el historial o activar la nueva función, la red social elimina toda la información que puede ser utilizada para identificar al usuario, desapareciendo así el vínculo que existe entre el historial de navegación y la bitácora de la aplicación con la cuenta en Facebook del usuario.
Facebook puntualiza que continuará compartiendo “información no personal” del usuario con sitios web y aplicaciones, que puede ser utilizada por los desarrolladores para saber, por ejemplo, si una aplicación es más popular entre hombres o mujeres. La empresa asegura que este procedimiento es posible sin necesidad de almacenar información que puede ser vinculada a la cuenta del usuario .
Hace un año nuestra publicación informaba que “Facebook vende datos personales de sus usuarios a 47 empresas externas”. En la oportunidad, un proyecto de investigación realizado por la Universidad Northeastern de Boston señalaba que Facebook recolecta grandes volúmenes de información personal de sus usuarios, la que intercambia o vende a empresas externas, totalmente desconocidas para los usuarios.
Según el informe, 47 empresas externas son destinatarias de los datos recolectados por la red social Facebook entre sus usuarios. Cinco de ellas reciben el nombre completo del usuario, mientras que 10 de ellas son notificadas de la posición física de este. Entre las empresas externas se cuentan redes publicitarias desconocidas.
En el documento académico se concluía que “el seguimiento digital de los usuarios está totalmente descontrolado, y muy pocos de ellos entienden actualmente las posibilidades, que están siendo aprovechadas actualmente por los actores comerciales, de vincular distintos tipos de registros de información personal de los consumidores”.