La petición fue hecha por John Koskinen, director del Consejo Presidencial para la Conversión Informática al Año 2000 por conducto de los medios de comunicación a los hackers que verán la noche del 31 de diciembre como la ocasión ideal para irrumpir en sistemas informáticos ajenos.
Al respecto, Koskinen declaró que es de esperar que estas personas entiendan que tendremos más que suficiente que hacer la noche de año nuevo, y que no será un buen momento para intentar probar si tenemos o no necesidad de mayor seguridad. Con ello, se refería al hecho de que muchos hackers consideran casi un servicio a la comunidad detectar los agujeros de seguridad en los sistemas informáticos públicos y privados.
De igual modo, agregó que si los hackers de todas maneras insisten en realizar su servicio social, les solicitaba encarecidamente esperar al menos una semana después del 31 de diciembre. Una de las principales razones que sustentarían la petición gubernamental, es la posibilidad de que con motivo del cambio de milenio se produzca una serie de ataques informáticos foráneos contra intereses estadounidenses.
