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Solidaridad Infantil en Bolivia
La Asociación Hospital 1º de Mayo nació en enero de este año con el fin de completar la asistencia pediátrica en un centro sanitario de la villa boliviana del mismo nombre. Fundada por el español Manuel Garrido Valenzuela, esta asociación sin ánimo de lucro recoge cualquier ayuda desinteresada que desarrolle una unidad de maternidad inexistente en kilómetros a la redonda.
Cuando Manuel Garrido, cirujano pediátrico, llegó a la localidad boliviana de Santa Cruz de la Sierra, observó una ciudad paupérrima y carente de salubridad. La migración interna se había concentrado en una serie de barrios sin apenas hacinamiento y con una elevada tasa de mortandaz.
Ésta fue la razón que llevó a los padres de la parroquia de San Antonio a la construcción del Hospital Primero de Mayo en la villa del mismo nombre. Sin embargo, los medios conseguidos no eran suficientes para una ciudad densamente poblada y con falta de personal pediátrico.
La cooperación de Manuel Garrido en el Hospital, durante el verano de 1988, hizo que su postura no quedase reducida a una ayuda desinteresada de un verano y repitió la experiencia en 10 nuevas ocasiones. Su ayuda ha facilitado la formación de otros médicos en el área infantil para cubrir el postoperatorio de las intervenciones quirúrgicas que Garrido efectúa durante el verano.
Fue así como poco a poco nació el germen de lo que años más tarde se convirtió en la Asociación Hospital 1º de Mayo. Una asociación sin ánimo de lucro que destina los fondos y donativos recaudados a la construcción del pabellón pediátrico y a la compra de material.
Actualmente, el objetivo, calificado de urgencia máxima, consiste en la construcción de una maternidad, con un servicio de neonatología incluido. La razón es la elevada tasa de mortalidad registrada en el momento del parto, tanto en el caso de la madre, como en la del recién nacido (es la más alta de toda América Latina).
En el mismo proyecto, también se incluye la ampliación de consultas y dos nuevos quirófanos, además de dos salas de partos, una de legrados y una sala de ecografía. El Micro-Hospital tendría así un competente departamento de pediatría en kilómetros a la redonda.
