En efecto, luego de haber comprado Geocities hace algunos meses, Yahoo! exige derechos de propiedad sobre todo el contenido presentado en las páginas web de sus miembros.
La exigencia de Yahoo! se basa en un párrafo del contrato suscrito al comprar Geocities, según el cual todo el material publicado mediante los servidores de Geocities pasa a ser propiedad de la compradora.
En otras palabras, los usuarios de Geocities pierden sus derechos de propiedad sobre el material publicado, lo que en teoría faculta a Yahoo! incluso a vender dicho material, sin que sus creadores tengan derecho a forma alguna de compensación económica o indemnización.
La presencia de la mencionada cláusula implica, entonces, que todos quienes hayan publicado páginas web e imágenes en los servidores gratuitos de Geocities, deben tener presente que ya tal material no les pertenece legalmente, al menos a entender de Yahoo!.
De hecho, si usted desea crear una página web en Geocities, debe firmar un contrato mediante el cual proporciona a Yahoo! el derecho a re-licenciar el contenido, de manera gratuita, permanente, irrevocable y no-exclusiva. De igual modo, se concede a Yahoo! el derecho a usar, reproducir, modificar, adaptar, publicar, traducir, crear trabajos derivados y mostrar sus contenidos en cualquier medio posible.
Yahoo! defiende las condiciones contractuales señalando que sus intenciones son promover el servicio y sus contenidos sin que sus miembros puedan aducir que se han violado sus derechos reservados en caso que la compañía publique material inédito de sus usuarios.
De igual modo, Yahoo! informa que permitirá a los usuarios de Geocities conservar sus páginas web bajo las condiciones estipuladas en el contrato anterior. Sin embargo, precisa que los usuarios no podrán hacer cambios a las páginas sin haber firmado previamente el nuevo contrato redactado por Yahoo!.
En nuestra opinión, Yahoo! podría perfectamente haberse protegido de eventuales demandas precisando en las condiciones de publicación de páginas web en Geocities que el usuario le faculta a usar sus contenidos con fines publicitarios. Sin embargo, los términos del nuevo acuerdo no implican otra cosa sino un intento de Yahoo por asegurarse, por la vía contractual, la posibilidad de hacer suya la propiedad intelectual y creaciones de terceros.
