Huawei presenta Atlas, nueva herramienta de Inteligencia Artificial
El 8 de julio se llevó a cabo el Huawei Computing Live Summit, donde la empresa presentó su nuevo proyecto de Inteligencia Artificial (IA), Atlas.
El 8 de julio se llevó a cabo el Huawei Computing Live Summit, donde la empresa presentó su nuevo proyecto de Inteligencia Artificial (IA), Atlas.
Además de velocidades más rápidas, 5G está teniendo un impacto positivo en la evolución de la Inteligencia Artificial, con fabricantes y desarrolladores de teléfonos inteligentes que se están moviendo para construir aplicaciones de IA más potentes.
La crisis actual no solo confirma que la forma en que usamos la tecnología va a cambiar de manera permanente, sino que también la transformación digital de la economía sucederá a un ritmo acelerado, dando paso a una sociedad hiperconectada.
IoT continúa posicionándose como uno de los avances tecnológicos más importantes de la actualidad, especialmente con el despliegue de las redes 5G.
La virtualización de las redes de telecomunicaciones y su habilitación por software hace cada vez más viable su gestión con aplicaciones de Inteligencia Artificial.
El valor de marca de las telecos no se verá afectado por el coronavirus. COVID-19 afectará a la industria de las telecomunicaciones con un impacto limitado ya que la revolución del teletrabajo aumenta la demanda.
Una de las vertientes fundamentales a las que se enfrenta el centro de datos del futuro es la computación en el borde de la red.
Después de años de expectativa y una cantidad considerable de publicidad, las redes inalámbricas de quinta generación (5G) finalmente se están convirtiendo en una realidad. La tecnología 5G podría afectar nuestras vidas de manera más espectacular que cualquier cambio tecnológico desde la propia Internet, ya que 5G nos permite alcanzar el potencial de un mundo completamente conectado. ¿Las razones? Velocidad, baja latencia y ubicuidad.
¿Cómo lograr un proyecto de Smart City? Se define como ciudad inteligente a una urbe que a su dotación de infraestructuras físicas, servicios y apoyos institucionales, suma la disponibilidad y calidad de las comunicaciones, transmisión del saber, seguridad y la dotación en infraestructuras sociales, al igual que la sostenibilidad ambiental.
Los próximos tres años serán críticos para prepararse y desplegar las redes que soportarán la conectividad 5G.