“Internet de las cosas” es un concepto acuñado por el Instituto tecnológico de Massachusetts (MIT), definido como una red de objetos cotidianos interconectados. Las tecnologías inalámbricas y el nuevo protocolo IPv6 harán posible conectar un número cada vez mayor de objetos. La empresa consultora ABI Research estima que actualmente existen más de 10.000 millones de tales unidades.
Por ahora, se trata de objetos que van desde cámaras y zapatillas a refrigeradores y básculas. Sin embargo, sólo la imaginación limitará los artículos que pueden ser conectados a Internet, lo que lleva a ABI Research a calcular que para 2020 habrá 30.000 millones de objetos conectados a la red.
“Con el número de objetos comunicándose con humanos y entre sí llegaremos a un punto en que la Internet actual, que es definida como Internet de las cosas se convertirá en IoE (Internet of Evertything, o Internet de todas las cosas)”, escribe ABI Research.
Éste concepto implica que prácticamente la totalidad de los objetos físicos podrán ser dotados de sensores y procesadores, teniendo así la capacidad de intercambiar información con otros objetos, sin intervención humana.
Esto abre numerosas posibilidades y aplicaciones. Por ejemplo, un reloj de pulsera que también controle el pulso del usuario puede comunicarse con el teléfono móvil de este y llamar a un número de emergencia en caso de detectar un paro cardíaco. Asimismo, el dispositivo GPS del teléfono -o del reloj- puede detectar otros usuarios en las cercanías y comunicarse con ellos para pedir ayuda.
IoE tiene un gran potencial, aunque indudablemente primero es necesario instalar la tecnología y ancho de banda que soporte sus aplicaciones. En este ámbito ya se han realizado considerables avances, que han estado principalmente basados en smartphones y laptops. Estos últimos han asumido el papel de nodos que ayudan a unidades menos sofisticadas a comunicarse, por lo que su papel es imprescindible en la estructura actual.
Según el pronóstico de ABI Research, al futuro estos aparatos hasta ahora pasivos pasarán a convertirse en nodos autónomos, por lo que para 2020 IoE representará el 60% de todas las unidades conectadas a Internet.
Por lo tanto, los smartphones y otros dispositivos móviles continuarán siendo pilares de conectividad, aunque no concentrarán la mayor parte de ella.
El informe completo, en idioma inglés, está disponible para usuarios registrados en el sitio de ABI Research (registro gratuito).
Ilustración: Googleglass de Google, es una ilustración por excelencia de “Internet de las cosas”.