Aunque el teléfono de Skype incorporaba software cubierto por una licencia GPL (General Public License), la mención al código fuente o a las condiciones que regulaban la licencia no estaban incluidas en el paquete, con lo que se infringía la licencia en sí. Por tal razón, Harald Welte, de gpl-violations.org presentó un requerimiento formal en contra de Skype ante un tribunal alemán.
Como resultado del requerimiento, la compañía SMC intentó corregir la situación adjuntando al teléfono un impreso con una lista de direcciones de Internet. En tales direcciones, los usuarios podrían leer las condiciones que regulaban la licencia como asimismo descargar el código fuente.
Sin embargo, la medida fue insuficiente. El tribunal de Munich dictaminó que al vender un producto en una caja es necesario adjuntar licencias impresas. Únicamente si el producto es comercializado directamente por Internet es suficiente hace referencia a documentos en línea.
En su fallo, el tribunal indica que Skype, como distribuidor de hardware de SMC, estaba obligada a velar por el cumplimiento de las condiciones de la licencia.
Fuente: heise.de