Con más de la mitad de la población mundial viviendo en urbes y produciendo más del 70% de las emisiones de carbono, las ciudades desempeñan un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático.
Un nuevo estudio del World Economic Forum (WEF) y Accenture establecer que, para avanzar, hay tres elementos clave. El primero es invertir en tecnologías de descarbonización. Tecnologías como las bombas de calor, la electricidad renovable distribuida y el almacenamiento inteligente son herramientas fundamentales para avanzar. Sofía Vago, directora ejecutiva de Accenture, explicó que “es necesario impulsar estas tecnologías de forma integral, ya que pueden tener un mayor impacto agregado en la reducción de emisiones cuando se implementan juntas, en lugar de individualmente. Por ejemplo, la generación de energía distribuida tiene más impacto cuando se combina con el almacenamiento que cuando se despliega sola”.
En segundo lugar, invertir en lo digital. Los edificios equipados para hacer operativos los datos (como los del uso de la energía y las emisiones), y que conectan los sistemas para permitir la optimización inteligente, estarán más preparados para el futuro. Sofía Vago destacó que “la fluidez digital y de datos amplificará el impacto de las intervenciones tecnológicas con bajas emisiones de carbono, mediante la mejora del apoyo a las decisiones operativas o los controles automáticos de los sistemas de gestión de edificios. El uso de gemelos digitales puede también mejorar la modelización de las decisiones y la eficiencia durante la construcción, el funcionamiento y el mantenimiento”.
En tercer lugar, se debe invertir en los servicios del ecosistema de la ciudad. Los edificios pueden ser una piedra angular de la descarbonización de la energía al proporcionar servicios al ecosistema de la ciudad en general. Vago explicó que “aquellos edificios equipados con generación renovable distribuida, almacenamiento y gestión inteligente de la energía pueden aportar servicios que respondan de forma eficiente a la demanda o a la frecuencia que aceleran la descarbonización de toda la ciudad al ofrecer soluciones que no requieren actualizaciones disruptivas de la red”.
La experta concluyó que la electromovilidad es también una gran oportunidad. “La ubicación conjunta de carga inteligente para vehículos eléctricos con edificios comerciales o de varias residencias puede proporcionar servicios de red y contribuir a la descarbonización del transporte de vehículos individuales”.
El estudio está disponible en este enlace (no requiere registro).