A sólo tres semanas de que los trece servidores que administran los nombres de los dominios de Internet fuesen objeto de un ataque masivo de negación de servicio (DoS), VeriSign que administra dos de los servidores decidió trasladar uno de ellos a una ubicación física y virtual secreta.
La máquina es conocida como el servidor root J, y hasta ahora ha estado conectado a Internet mediante la misma red que el servidor root A, que es el segundo administrado por VeriSign.
En este contexto, la publicación ZDNet recuerda que hace un año, ICANN recomendó trasladar el servidor root J, como resultado de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 contra Estados Unidos.
El director de ICANN, Louis Tuton, declaró a ZDNet que muchas de las tareas realizadas por los servidores root son duplicadas en otros lugares, lo que implica que aunque hubiera un ataque que dejara fuera de servicio a los trece servidores, no ocurriría que Internet simplemente dejara de funcionar.