Nunca antes se había registrado un ataque tan fulminante y masivo como el protagonizado por Slammer. El virus explotó una conocida vulnerabilidad de SQL Server de Microsoft, provocando una intensa congestión en el tráfico digital de Internet.
Según una investigación conjunta realizada por varias organizaciones estadounidenses de seguridad informática, la cantidad de servidores infectados se duplicaba cada 8,5 segundos durante los primeros tres minutos del ataque. Tal velocidad supera en 250 veces los niveles alcanzados por Code Red en 2001.
La gran mayoría de los 75.000 servidores afectados por SQL Slammer fueron infectados durante los primeros 10 minutos del incidente.