El año pasado, la citada administración cedió a los deseos de la industria informática y asignó una cuota extra de 50.000 visados tipo H-1B, con el fin de que extranjeros capacitados en informática, o estudiantes extranjeros de tal área, pudieran obtener permisos de residencia y de trabajo en Estados Unidos.
Ahora, cuatro meses antes de poder comenzar a usar la cuota correspondiente al 2000, se han agotado las visas para el presente año.
Refiriéndose a la materia, Dan Burton, director de Novell, declaró a San José Mercury News que al haberse agotado el número de visas aumentan las presiones contra un mercado laboral desde ya difícil, por lo que requirió soluciones políticas rápidas y precisas.