Según la publicación The Sunday Times, RIM considera una posible escisión de la compañía en dos unidades de negocio. Una de ellas, encargada de la fabricación de los terminales BlackBerry, sería vendida a terceros, en tanto que la división de redes sería conservada por RIM. Otra alternativa considerada por la empresa sería la venta de un gran porcentaje de sus acciones a un socio comercial, como por ejemplo Microsoft.
The Sunday Times refiere especulaciones en el sentido que Amazon y Facebook estarían interesados en asumir el control de un fabricante de teléfonos móviles y que, en tal orden de ideas, les atraería hacerse de BlackBerry a precio de liquidación. Según información extraoficial, Facebook se encuentra abocada a la fabricación de su propio teléfono móvil, mientras que Amazon anteriormente se habría interesado por comprar BlackBerry.
Las aspiraciones de Microsoft en el ámbito de la telefonía móvil también son conocidas. La semana pasada, la empresa lanzó su propia tableta Surface, aparte de tener en pie un acuerdo de cooperación con el fabricante Nokia, que actuará como punta de lanza para la propagación de Windows Phone 8 en el mercado de la telefonía móvil.
En su análisis, The Sunday Times recuerda que Research in Motion fue, por muchas razones, la empresa que dio un impulso decisivo al mercado de los smartphones. La plataforma de BlackBerry para correo electrónico y mensajería es altamente viable, y podría mantenerse vigente, independientemente de lo que ocurra con los terminales en sí.
Gran parte de los usuarios de BlackBerry no tienen la posibilidad de elegir otra plataforma, debido a que sus empleadores prefieren la gran seguridad que ofrece Research in Motion.
La división de hardware de RIM representa el 80% de la facturación. Por tal razón, si ésta unidad es vendida, la empresa quedará reducida a un mínimo absoluto, que no le permitiría mantener su actual posición en el mercado.
Al margen de los análisis y consideraciones de los medios, la gerencia de RIM deberá tomar medidas urgentes. Durante los últimos cinco trimestres, la empresa ha decepcionado al mercado e inversionistas debido a sus reducidos niveles de facturación. La empresa ha anunciado reducciones de personal y de costes, sin poder generar mayor confianza en el mercado bursátil: las acciones de RIM han caído en 64% durante los últimos 12 meses.