El empresario John Wall es cofundador y propietario de la compañía Vista, con oficinas en Redmond, Estados Unidos, dedicada a ofrecer software y servicios a pequeñas empresas.
La compañía Vista ha existido desde 2000, y ahora Wall estudia qué posibilidades tiene frente a Microsoft, que decidió asignar el nombre Vista a su próximo sistema operativo. Entre las alternativas que maneja Wall figura la de llevar a Microsoft a los tribunales de justicia, con el fin de que renuncie al nombre Vista.
Vista es propietaria del dominio vista.com. Una serie de empresas también usa la marca registrada Vista para sus soluciones de pago, escribe The Register.
A juicio de Wall, el nombre del sistema operativo Vista será motivo de confusión para sus clientes y, por lo tanto, ocasionará un perjuicio económico a su compañía.