La compañía Lindows, distribuidora de una herramienta que permite ejecutar algunos programas de la plataforma Windows en Linux, considera que Windows (ventanas) es una palabra genérica, cuya propiedad absoluta como marca registrada no puede arrogarse el gigante informático Microsoft.
Por ello, y también en represalia ante una querella interpuesta anteriormente por Microsoft en su contra, Lindows presentó un requerimiento orientado a que un tribunal de instrucción fallara por oficio que la palabra Windows es de libre uso.
Sin embargo, el juez de Seattle que presidió la audiencia no estaba dispuesto a despojar a Microsoft del derecho exclusivo sobre la palabra Windows, por lo que denegó el recurso interpuesto por Lindows.
Así, ahora corresponde a Lindows decidir si llevar el caso ante los tribunales de justicia, en un juicio a gran escala. Todo indica que así será, y que las primeras audiencias serán realizadas durante el mes de abril.