La junta directiva de Liquid Audio resolvió la semana pasada disolver la sociedad, cuyo giro era la creación de software diseñado para impedir la distribución ilegal de música.
A pesar de haber sido elogiada en coro por la industria discográfica por su tecnología de protección de música, Liquid Audio no pudo sostenerse económicamente en competencia con los servicios P2P de distribución de música pirateada.
Otra razón determinante para su fracaso fue que Liquid Audio en ningún momento pudo ofrecer un número aceptable de melodías en venta. La causa de ello es atribuida directamente a la indiferencia y lentitud con que funciona la industria discográfica.