Según los grupos, la propuesta extendería impropiamente la autoridad policíaca de los gobiernos nacionales y pondría en riesgo la privacidad de los usuarios de Internet y a la libertad de los programadores informáticos.
Mediante tal acuerdo, se consideraría un crimen crear, descargar o enviar a un sitio web cualquier dispositivo, incluyendo un programa, diseñado o adaptado principalmente para obtener acceso no autorizado a un sistema informático. Asimismo, prohibiría el software diseñado para interferir con el funcionamiento del sistema de una computadora ya sea borrando o alterando datos.
El acuerdo autorizaría a las autoridades ordenar a alguien revelar su sus claves personales de encriptación, a la vez que requeriría a los sitios web y a los proveedores de Internet reunir información sobre sus usuarios. También requeriría a los países que firmen el trato, establecer a la violación de propiedad intelectual como un delito calificado bajo sus leyes domésticas.
Esto es un asalto directo a las protecciones legales y constitucionales que han sido establecidas por los gobiernos nacionales para proteger a sus ciudadanos, señaló Marc Rotenberg de Electronic Privacy Information Center (EPIC).
Rotenberg añadió que tanto EPIC como los otros grupos desean manifestar su oposición a la medida antes de que ésta sea propuesta a las naciones participantes.
El gobierno de EEUU ha ayudado a la creación de la propuesta del Consejo de Europa, la cual se espera sea finalizada en los próximos meses, de ser así, sería el primer acuerdo internacional contra el crimen informático.