Una de las razones de la escasez de determinados componentes es el terremoto que sacudió en septiembre a Taiwán, país que produce entre el 12 % y el 15 % del volumen global de chips de memoria.
Según analistas consultados por The New York Times, los fabricantes de computadoras deberán compensar la carestía y escasez que les afecta aumentando los precios de sus productos.
Otros componentes que escasean en la actualidad son las pantallas de cristal líquido (LCD), que también son producidas a gran escala en Taiwán. En tal sentido, Dell y Compaq, las dos mayores fábricas de computadoras del mundo, ya han anunciado que no estarán en condiciones de suplir a tiempo la demanda de máquinas portátiles.