La cubierta está hecha de resina de policarbonato, con un compuesto especial de silicona, desarrollado recientemente, que retarda el efecto de las llamas, eliminando además la necesidad de usar compuestos de halógeno, para una seguridad de alto grado, fuerza y capacidad de reciclaje, explica la compañía.
El desarrollo del producto tomó dos años, y según las compañías fabricantes es muy efectivo al retardar la combustión de las resinas de termoplástico sin el uso de componentes de bromuro y fósforo, y no genera substancias tóxicas cuando es quemada.
En otras palabras, el producto es ideal para proteger computadoras, teléfonos celulares y otros aparatos electrónicos en caso de incendios.