Oracle considera que Java tuvo una oportunidad real de convertirse en un sistema operativo para dispositivos móviles. La información trasciende de un documento redactado por Oracle en el marco de un litigio contra Google sobre la implementación -a su juicio ilegal- de 37 interfaces de programación de Java en el sistema operativo móvil Android. El documento ha sido reproducido íntegramente por la publicación Ars Technica (documento PDF en inglés, de 6 páginas).
Uno de los pasajes más relevantes del artículo señala: “Dado el amplio dominio que Android ha conseguido con su continuo, y no autorizado, uso de 37 APIs de Java durante los últimos años, Android ha provocado un daño irreparable para el potencial que tuvo Java de convertirse en un sistema operativo para dispositivos móviles. Esto se habría conseguido con el principio de “write once, run anywhere” (escriba el código una vez, y ejecútelo en todas partes) en el que se basa Java”.
A juicio de Oracle, el dominio alcanzado por Google en el mercado de dispositivos móviles mediante Android, y su decisión de no instalar en Android compatibilidad con la plataforma Java, anuló el valor potencial de una versión derivada, y licenciada, de la plataforma Java para el mercado de dispositivos móviles.
Cabe señalar que esta reseña histórica de Oracle no necesariamente es correcta. En efecto, Android no apareció repentinamente en un mercado móvil donde Java hubiera tenido éxito con su principio de “write once, run anywhere”.
En el documento, Oracle escribe que las versiones de Android que han sido distribuidas después de su demanda inicial contra Google, presentada en 2010, infringen propiedad intelectual de Oracle. La empresa sustenta este punto de vista señalando que Android ha adquirido gran popularidad no sólo en teléfonos inteligentes, sino también en unidades como televisores, automóviles y relojes inteligentes.
El documento ha sido remitido al juez William H. Alsup, magistrado de la corte distrital de San Francisco, California. Alsup fue el juez instructor de la causa inicial, donde concluyó que la estructura, secuencia y organización de interfaces de programación no están protegidos por la legislación de propiedad intelectual.
Posteriormente, un tribunal de casación llegó a la conclusión opuesta, por lo que una apelación presentada por Google ante la Corte Suprema fue desestimada en junio pasado. Por tal razón, la causa fue devuelta al tribunal presidido por Alsup, donde se indicará si Google puede invocar las normas estadounidenses, algo difusas, de “uso razonable”. El juicio original, el jurado no se pronunció sobre este tema en particular.
Si producto de las nuevas deliberaciones del jurado, el juez Alsup da la razón a Google y su argumento de “uso razonable”, el gigante de las búsquedas posiblemente podrá seguir utilizando las APIs señaladas, sin tener que pagar licencia a Oracle.