En los últimos años el “Edge Computing” es un tema que ha tomado gran relevancia. Edge Computing es, prácticamente en todas las grandes conferencias sobre Centros de Datos o Servicios en la nube alrededor del mundo, un tema de gran debate por sus grandes implicaciones; sin embargo, su definición es aún imprecisa.
Edge es donde las personas, dispositivos o ‘cosas’ intercambian datos con la red, pero hay algunos puntos que deben aclararse al respecto. Edge es donde ocurren las conexiones, si no las hay no puede llamarse así. La conectividad, que puede ser inalámbrica, por fibra o cobre, tiene un rol primordial en Edge.
En segundo lugar, además de las conexiones, el valor de Edge son los datos. La mayoría de los datos en Edge se procesan de manera local, por lo cual en muchos casos son datos en tiempo real; el resto de ellos se puede pasar a otro Centro de Datos para otro tipo de tratamiento y almacenamiento. De igual forma que con las conexiones, si no hay datos, no es Edge.
La tercera consideración a tomar en cuenta es que las interacciones en Edge van mucho más allá de los seres humanos y las redes. Los dispositivos o ‘cosas’ desempeñan un rol fundamental.
Pero esta definición no incluye la ubicación ni el tamaño de Edge. Éste puede estar ubicado en cualquier sitio, como torres celulares, aviones, automóviles, hogares y hasta se puede llevar en la muñeca. El tamaño de las instalaciones de cómputo de Edge, a veces denominados Centros de Datos al borde (Edge data centers), pueden variar considerablemente y oscilar entre 1-2 kW (1 o 2RU) o menos, hasta sub-mega Watts, por ejemplo, algunas docenas de racks.
¿Qué está impulsando Edge Computing?
La respuesta, aunque tiene muchas caras, es pura física. A medida que la red continúa creciendo y teniendo mayor distribución, la latencia se incrementa. Se trata del equilibrio dinámico entre la latencia causada por la física y la creciente demanda de una mejor experiencia del cliente.
Hoy en día, la demanda de mejores experiencias de los clientes y respuestas más rápidas es cada vez mayor. Amazon informó que cada 100 milisegundos (ms) de latencia les cuesta un 1% de pérdida en ventas1. De igual forma, Google descubrió que una demora de 500 ms más en el tiempo de generación de la página de búsqueda disminuye un 20% del tráfico.
En la actualidad, los proveedores de contenido tradicional, telecomunicaciones y servicios en la nube han hecho grandes inversiones en Edge Computing, e incluso empresas de otros sectores verticales, como fabricación y venta minorista, han comenzado a invertir en ello.
Se espera que Edge Computing ofrezca enormes oportunidades de crecimiento en hardware y software. Además, durante la conferencia de Data Center de Gartner de 2017, Gartner predijo que el 40% de las grandes empresas comenzarán a incorporar los principios de Edge Computing en sus proyectos para 2021, cifra mayor al menos del uno por ciento del 2017, por lo que cada vez resulta más claro que es necesario que las empresas desarrollen una estrategia de Edge Computing para lograr mayor productividad y mejor experiencia del cliente.
Por Frank Yang, Gerente de Desarrollo de Estrategias de Mercado para la unidad comercial Fibra ISP en CommScope