Según informó Opera esta semana, su presidente Jon S. von Tetzchner cruzaría nadando el Océano Atlántico para cumplir con una apuesta. La travesía fue iniciada el 25 de abril, pero debió ser cancelada al día siguiente debido a un percance.
El plan era que el director de relaciones públicas, Eskil Sivertsen, remaría en un bote inflable junto a su jefe; primero lo largo de litoral noruego, luego hacia Islandia, y finalmente cruzaría el Océano Atlántico con destino a Nueva York.
Sin embargo, la mañana de ayer ´el bote inflable de Sivertsen comenzó desinflarse´ en un lugar no especificado del fiordo, con lo que el audaz proyecto debió ser cancelado. Versiones mordaces de periodistas noruegos indican que el incidente se había producido ´a pocos cientos de metros desde donde se inició la travesía´.
Imagen: Así terminó la proyectada proeza del presidente de Opera (y un buen truco publicitario).