La noticia fue dada a conocer por la empresa Network Associates, según la cual el virus, que ha sido bautizado Remote Explorer, no necesita contaminar a cada máquina en particular para cumplir su cometido maligno. El daño producido por Remote Explorer consiste en cifrar (encriptar) algunos archivos seleccionados.
El virus, diseñado con características que le dan carácter de único, monitorea las rutinas de los administradores de sistema y las copia para así conseguir acceso posterior a máquinas y redes. Asimismo, Remote Explorer no requiere la intervención humana mediante, por ejemplo, el envío de correo electrónico, para accionar.
Network Associates identificó el virus en MCI Worldcom, compañía de telecomunicaciones con presencia en más de 50 países.