El documento legal señala: Será ilegal para toda persona -con la intención de atemorizar, intimidar, amenazar, acosar, importunar u ofender- utilizar cualquier dispositivo electrónico o digital, y recurrir al lenguaje obsceno, lascivo o profano, o sugerir cualquier acto lascivo o profano, o amenazar con infligir daño físico a una persona o a la propiedad de alguna persona.
La redacción del cuerpo legal ha generado un fuerte debate en Internet, pues mientras nadie cuestiona la penalización de amenazas de infligir daño físico, el elemento importunar u ofender, lleva a preguntarse el alcance que tendrá la ley en la práctica.
En tono irónico, el sitio británico The Register indica que, en caso de ser aprobada, la ley implicaría que los debates y foros en Internet en el estado federado del Gran Cañón se convertirían en apacibles refugios de civilidad y discurso iluminado. Esto, debido a que los usuarios probablemente no estarían dispuestos a importunar u ofender a nadie, por el riesgo de que, al hacerlo, estarían cometiendo un delito penado por la ley.
La publicación explica que la nueva ley, es, en realidad, una revisión de una normativa creada durante la era de la telefonía análoga, sustituyéndose el texto usar un teléfono, por la nueva fórmula utilizar un dispositivo electrónico o digital. En la época en que fue creada la ley original, las comunicaciones eran, por definición, de tipo uno-a-uno. La nueva versión de la ley surge, por el contrario, en una era en que las comunicaciones son de uno-a-muchos, y que incluso pueden tener carácter anónimo.
Fuente: The Register
Fotografía: Seth S. Kim (vía Flicker)