SANTIAGO: Microsoft se propone endurecer su línea frente a los piratas de software. En una entrevista con el periódico financiero alemán Wirtschaftswoche, el presidente de la compañía, Steve Ballmer, indica que está considerando bloquear el acceso de inversiones piratas de Windows a los servicios de actualización del sistema operativo. Quienes hayan instalado versiones ilegales de Windows deberán arreglárselas por sí solos; incluso cuando Microsoft publique actualizaciones y parches para vulnerabilidades críticas, advirtió Ballmer.
Wirtschaftswoche observa que si bien es cierto una iniciativa de este tipo obligaría a muchos usuarios a comprar versiones legítimas de Windows, también se produciría un aumento explosivo de virus, gusanos y spam. Al respecto, indica que una instalación nueva de Windows, sin actualizaciones de seguridad, en promedio es infectada por malware menos de 15 minutos después que la máquina ha sido conectada a Internet.
Aún así, nos vemos en la necesidad de considerar la forma en que abordaremos este tema a futuro. Aparte del tema de la seguridad informática, hay aspectos económicos que considerar, apuntó Ballmer.
El problema de la piratería de software alcanzado niveles extremos en Asia. En países como China y Malasia, entre el 95 del 98% de los programas de Microsoft que están siendo usados, son copias piratas, concluyó Ballmer.