Como parte de la actualización Windows 10 Creators Update, Microsoft ha presentado una serie de nuevas características y funcionalidades que podrían ser incorporadas a la versión Redstone 3 del sistema operativo, cuyo lanzamiento está previsto para el cuarto trimestre.
Uno de los elementos a los que Microsoft ha dedicado especial atención es al rendimiento de la batería en dispositivos portátiles. La versión beta más reciente de Windows 10 disponible para desarrolladores, Build 16176, incorpora una nueva tecnología que ralentiza automáticamente aplicaciones de fondo con el fin de reducir el consumo eléctrico del aparato. Esto, en consecuencia, incrementa el rendimiento de la batería hasta en 11%, según ha informado la empresa a los participantes en el programa Insiders.
La función, denominada “Power Throttling” -en alusión a un concepto mecánico que consiste en asfixiar un motor a combustión- ajusta la CPU a sus modos más eficientes de operación. Al respecto, la compañía escribe en su blog que “la CPU cumple las instrucciones que se le han dado, aunque consumiendo el mínimo posible de batería en la ejecución de la tarea”.
Microsoft explica además que “la mayoría de los usuarios de Windows tienen diversas aplicaciones siendo ejecutadas simultáneamente y, es el caso, que las apps que operan constantemente pueden agotar la batería. Ante ello, con la versión Insider Preview build (Build 16176), hemos apalancado o las capacidades del silicio con el fin de realizar trabajo de fondo en una modalidad de bajo consumo eléctrico, aumentando constantemente la vida útil de la batería, aunque manteniendo el acceso de los usuarios a las potentes capacidades multitareas de Windows”.
La función es configurable, y permite al usuario suprimir las preferencias estándar de la aplicación, por ejemplo seleccionando apps que no deben ser ralentizadas.