Entre las causas que determinaron el fracaso en las negociaciones se menciona un desacuerdo insuperable en torno al precio, y preocupaciones por parte de Microsoft sobre la débil posición actual de Nokia en el mercado mundial de la telefonía móvil. Según fuentes cercanas a las negociaciones, es improbable que ambas empresas reanuden el diálogo.
Se desconoce el importe requerido por Nokia por su división de celulares. En 2012, la producción de teléfonos móviles representó alrededor del 50% de la facturación total del consorcio finlandés. La valoración bursátil de Nokia en Nueva York es ligeramente superior a los 14.000 millones de dólares. Desde febrero de 2011 -cuando el entonces nuevo CEO de Nokia, Stephen Elop declaró que la empresa debería deshacerse de Symbian o desaparecer- el 70% de la capitalización de mercado de Nokia ha desaparecido. Como se recordará, antes de ser contratado por Nokia, Stephen Elop se había desempeñado en la gerencia de Microsoft.
Después de abandonar su plataforma Symbian, Nokia firmó una alianza estratégica con Microsoft, que implicaría entre otras cosas una transición total del sistema operativo Windows Phone para smartphones.
Una portavoz de Nokia restó importancia a la filtración referida por The Wall Street Journal señalando que ambas empresas se reúnen frecuentemente como parte de su alianza estratégica y comercial. Microsoft, por su parte, no ha comentado el tema.
Las acciones de Nokia experimentaron la víspera una fuerte caída luego de conocerse información extraoficial según la cual Huawei estaría interesada en comprar la compañía finlandesa. La información fue horas más tarde desmentida categóricamente por Huawei.
Ilustración: Steve Ballmer y Stephen Elop, al anunciar su alianza estratégica en febrero de 2011 (Fotografía: Nokia Press)