La compañía presentó un documento en el cual pedía aplazar el proceso de apelación en un nuevo juicio, en tanto que el Departamento de Justicia pidió un proceso de apelación más corto.
Aunque Microsoft no ha ganado el nuevo juicio, puede sentirse satisfecho, ya que aún y cuando se acoja la petición del Departamento de Justicia (DOJ, por sus iniciales en inglés), el proceso se dilatará hasta el siguiente año, y una nueva administración en el gobierno de EEUU estará a cargo. En caso de que George W. Bush ganase las elecciones, Microsoft tendría un respiro ya que todo indica que el candidato republicano está menos inclinado a doblegar la compañía que Al Gore.
Sin embargo, si la Corte de Apelaciones favorece la petición de Microsoft, existe la posibilidad para la compañía de reabrir prácticamente todo el juicio. De cualquier forma el proceso de apelación se esperaría al menos hasta marzo. Incluso si la corte vota por la propuesta del DOJ, el proceso se extendería hasta el próximo año, y si Microsoft pierde puede recurrir a la Suprema Corte.