Al respecto, Microsoft considera que la compra de Netscape por parte de AOL le convierte en un competidor que restaría toda credibilidad a las afirmaciones de que Microsoft constituye un monopolio.
Y de hecho, gran parte de la causa antimonopolios se basa en la acusación de que Microsoft habría usado métodos ilegales para dominar el mercado de los lectores web y, de paso, eliminar de la competencia a Netscape, escribe WinInfo.
La argumentación de Microsoft fue desestimada por los abogados del Departamento de Justicia, a cuyo juicio AOL no es una amenaza para Microsoft al no ser una empresa dedicada a la venta de sistemas operativos. Los abogados de Microsoft, por su parte, refutaron tal análisis señalando que el software desarrollado por AOL, en combinación con la tecnología de Netscape, podría dar lugar a una nueva plataforma que estaría en condiciones de competir directamente con Windows.