Uno de los mitos más difundidos actualmente en el ámbito de la seguridad informática indica que los virus informáticos pueden infectar, vía Bluetooh, los sistemas electrónicos de automóviles. Recientemente, la compañía de seguridad rusa Kaspersky Labs fue contactada por un cliente que aseguraba que su Toyota Lexus había sido infectado con el virus Cabir. Sin embargo, la compañía finlandesa F-Secure ha probado un automóvil Toyota Primus con el mismo sistema electrónico y concluido que tal posibilidad es inexistente.
Cabir es un código maligno escrito para teléfonos móviles, que se propaga mediante conexiones inalámbricas Bluetooth. Varios proveedores de software antivirus ya han lanzado aplicaciones de seguridad para teléfonos móviles, que protegen contra Cabir y otros virus.
Varios automóviles nuevos han incorporado la tecnología Bluetooth, que entre otras cosas es usada para transferir las listas de direcciones de un teléfono móvil al teléfono del automóvil. Tal posibilidad ha generado rumores en el sentido de que los propios virus pueden ser trasferidos por esa vía.
F-Secure dice haber realizado ensayos prácticos en asociación con Toyota, con el fin de transferir los virus a automóviles. Primero se realizaron todos los ataques víricos conocidos para Bluetooth, sin que fuera posible infectarlo.
Finalmente, el sistema electrónico quedó muerto, pero debido a que se agotó la batería del automóvil, bromea F-Secure, agregando que el mito de los virus para automóviles puede desde ya quedar descartado.