Al mismo tiempo que fijamos nuestra mirada en ellos, los gobiernos y la misma comunidad se cuestionan qué tan bien dotados de herramientas están estos héroes para poder responder a una demanda de su atención que parece desbordarse. Nunca fue tan relevante la pregunta qué tan bien comunicados están, porque nunca antes fue tan evidente el posible impacto de una comunicación fallida de un profesional de la salud, como lo es alrededor de la actual pandemia que afecta el mundo.
A pesar de que la salud es fundamental para todas las personas, varía la atención brindada alrededor del mundo. Los servicios otorgados, el tiempo de espera, la eficiencia en la atención e incluso la infraestructura e inversión destinados al sector, son grandes diferenciadores entre países y por ende factores clave en las estadísticas al lidiar con situaciones críticas.
De acuerdo con información del Sistema Nacional de Información en Salud y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México existen aproximadamente 2,863 establecimientos de salud privados, 1,395 hospitales públicos, 77 mil 523 consultorios y más de 21 unidades de atención ambulatoria. Por otro lado, se calcula que el personal médico con el que se cuenta es de 281 mil 283 médicos y más de 286 mil 239 profesionales de enfermería. Si comparamos este número con la población actual en México, estimada en 127 millones de personas, podemos darnos cuenta de que México se enfrenta a un gran reto a la hora de optimizar recursos para poder otorgar la atención necesaria. Es evidente entonces que, durante una crisis sanitaria, se requeriría de soluciones tecnológicas que apoyaran al equipo médico para el cuidado de los pacientes.
Las tecnologías para comunicación crítica, que se puedan implementar rápidamente y escalar fácilmente, al tiempo que se continúa permitiendo la interoperabilidad y seguridad de las comunicaciones en las instalaciones, ayudan a realizar con eficiencia, las operaciones diarias de las instituciones de salud.
Por ejemplo, el sector diariamente se enfrenta a desafíos de comunicaciones, operaciones y seguridad. Disponer de la información correcta y actualizada dentro de los centros de salud y camino al hospital, puede ayudar a mejorar y maximizar la atención en esos momentos cruciales y salvar vidas. Al tener certeza de los diagnósticos y la capacidad en tiempo real de las instalaciones, la coordinación se vuelve una actividad más sencilla que no amerite tanto trabajo administrativo, y que vuelva más eficiente el tiempo dispuesto por el personal médico.
Además, en un panorama crítico, donde es importante mantener medidas higiénicas especiales y el menor contacto físico interpersonal, el uso de radios y dispositivos es clave, ya que el uso de la voz podría convertirse en una herramienta de comunicación fundamental, al alcance de un solo botón PTT (Pulsar para hablar o por sus siglas en inglés Push to Talk) y capaz de transmitirse vía accesorios de manos libres, sin tener que parar ninguna actividad física.
Hoy es posible equipar al personal de instalaciones médicas con soluciones que les permitan transmitir video, voz y mensajes, así como acceder a la información necesaria desde un dispositivo móvil, para que así puedan tomar decisiones fundamentadas y asegurar mejores resultados para el paciente.
Un ecosistema más comunicado, es un sitio que permite una gestión de recursos mejor aprovechados, por lo que también es de gran importancia conectar las distintas redes dispersas como radios, celulares, Wi-Fi y telefonía, para posibilitar la comunicación entre ellas. Ya sea con un smartphone, radio, teléfono fijo o cualquier otro dispositivo de comunicación, el personal médico puede conectarse instantáneamente y de manera segura a través de soluciones como WAVE PTX.
Es importante garantizar que los servicios y operaciones esenciales puedan hacer frente a los problemas de salud prevalentes. Los servicios de salud deben involucrarse activamente para garantizar una respuesta efectiva y rápida, es por eso que el uso de soluciones de comunicación de misión crítica debe intensificarse para apoyar a los colaboradores del sector salud a través de una mejor comunicación y gestión de la información. Aquí es donde la planificación y el monitoreo adecuados son esenciales para garantizar que no se interrumpa la atención médica esencial en situaciones complejas. De su continuidad y eficiencia depende en gran medida, el bienestar de la comunidad.
Por Pedro Mavo, director de cuentas comerciales para Motorola Solutions Latinoamérica