La decisión de nombrar a Richard Posner como mediador fue celebrada por Microsoft, compañía que ha expresado gran interés por llegar a un acuerdo extrajudicial que haga innecesario un dictamen judicial.
De igual modo, el juez Thomas Penfield Jackson estableció un programa de audiencias y negociaciones verbales que serán iniciadas si ambas partes no llegan a un acuerdo antes del 20 de enero del próximo año.
La causa antimonopolios contra Microsoft se ha extendido considerablemente, y pudiera tomar incluso dos años más en caso de que un eventual fallo, absolutorio o condenatorio, sea llevado por la parte perdedora a todas las instancias de apelación, incluida la Corte Suprema.