Joel Golby, que escribe para The Guardian, ha examinado el ascenso meteórico y la posterior caída de los tokens no fungibles (NFT). Según los últimos datos, el 95% de estos activos digitales se han depreciado hasta perder todo su valor, lo que marca un aparente final de la locura por los NFT que una vez cautivó a la comunidad en línea. Golby atribuye el atractivo inicial de los NFT a una confluencia de factores, entre los que destaca la omnipresente sensación de soledad y aislamiento social que aumentó durante la pandemia. Estos sentimientos se vieron exacerbados por la especulación financiera en medio de un floreciente mercado de criptodivisas y otros planes de enriquecimiento rápido.
Los NFT no sólo prometían la propiedad de activos digitales almacenados en una cadena de bloques (blockchain), sino también posibles aplicaciones futuras. La idea era que estos tokens podrían integrarse con el tiempo en el metaverso, convertirse en tarjetas de visita digitales o incluso servir como vías de admisión a comunidades exclusivas en línea. Esta noción de comunidad resultaba especialmente atractiva en un momento en el que los espacios sociales en línea tradicionales se habían convertido en zonas de conflicto y desencuentro.
Sin embargo, el mercado de las NFT ha demostrado ser más volátil que sostenible. A pesar de generar la asombrosa cifra de 17.000 millones de dólares en ingresos en 2021, el sector experimentó una brusca caída del 90% en 2022. La desilusión fue quizá más evidente en el gran número de malas inversiones en arte digital de baja calidad, lo que provocó importantes pérdidas financieras para muchos.
Golby advierte de que, si bien la moda de las NFT puede haber disminuido, los factores que la alimentaron están lejos de haber desaparecido. La soledad, el aislamiento social y el atractivo de la riqueza digital siguen acechando. Así pues, la cuestión central no es sólo por qué estalló la burbuja de las NFT, sino cuál será la próxima tendencia digital o de Internet para satisfacer estas necesidades sociales y emocionales constantes.
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