Jobs entró al escenario vistiendo pantalón vaquero, camiseta y americana, lo que naturalmente no le impidió cautivar al público desde un primer momento. En su alocución, Jobs señaló que Apple tiene cuatro grandes objetivos centrales; a saber, 1) fabricar las máquinas más veloces de la industria que estén 2) dotadas de la mejor capacidad gráfica posible, 3) que brinden al usuario el mejor grado de escalabilidad y 4) que tengan el mejor diseño.
Precisamente este último punto fue un elemento central del discurso, al presentar Jobs cuatro nuevos modelos de iMac, en cuatro colores diferentes. Comentando la novedad, señaló que cuando usted compre una computadora, la pregunta más importante será ¿cual es su color favorito?. Bromeando aún más, dijo tener esperanzas de que el público coleccione las iMac en los cinco colores disponibles a contar de ahora.
Tal y como se esperaba, se refirió al éxito de ventas iMac, que a nivel mundial ha vendido 800.000 unidades, a un promedio de cuatro por minuto.
Otra novedad importante fue el anuncio de una nueva versión de las potentes máquinas G3, calificadas de demonios de la velocidad por el propio Jobs.
Respecto a las relaciones con Microsoft, Jobs las calificó de excelentes el 99% del tiempo, añadiendo que el 1% restante estamos discutiendo, por lo general sobre multimedios.