SANTIAGO: En oportunidades anteriores, BSA ha establecido sistemas de recompensa basados en la delación. El resentimiento personal y el sentido de responsabilidad parecen motivar muchas de las denuncias sobre piratería recibidas por la entidad.
En esta oportunidad, la división nórdica de BSA informa que un gran número de personas opta por vengarse de sus ex empleadores denunciando el uso de software ilegal.
Para la industria del software, BSA tiene la misma relevancia que RIAA para la industria discográfica. Ambas organizaciones combaten la distribución ilegal de material con derechos reservados.
En el caso nórdico, el portavoz de BSA en la región, Trude Berg, informó a la publicación Erhverv que los empleados despedidos representan más de la mitad de todas las denuncias recibidas. Supongo que buscan desquitarse de su anterior empleador, comentó Berg a la publicación.
El ejecutivo comentó que otro grupo importante de delatores está compuesto por competidores y consultores externos que han tenido acceso a los sistemas de las empresas denunciadas.