En la investigación, referida por la publicación Jama, los expertos entrevistaron a 469 pacientes de cáncer cerebral, de ambos sexos y con edades comprendidas entre los 18 y lo 80 años, sobre sus hábitos de uso de teléfonos celulares. Entre otras cosas, se les preguntó cuanto tiempo hablaban por teléfono celular en el transcurso de un mes.
El resultado fue comparado con los datos de un grupo de control, correspondiente a 422 personas sin cáncer cerebral, pero cuyos hábitos de vida se asemejaban a aquellos de los enfermos, tanto en lo relativo a consumo de alcohol y tabaco como a volumen de trabajo.
Si bien la investigación concluyó que no existe una relación directa de causa y efecto entre el hecho de usar teléfono celular y desarrollar cuadros cancerígenos, los investigadores recalcaron que será necesario realizar nuevos estudios, toda vez que algunos tipos de cáncer se desarrollan lentamente.
En otras palabras, aunque la investigación no arrojó indicios que prueben que el uso del teléfono celular es dañino, los científicos prefirieron no descartar en un 100% la existencia de tal riesgo.