En la demanda, presentada en enero de 1999, se alegó que los acusados hicieron cargos ilícitos a tarjetas de crédito, lo que determinó la clausura preventiva e inmediata del sitio inculpado.
Para llevar a cabo el fraude, los acusados compraron acceso a una base de datos de tres millones de números de tarjetas de crédito de Charter Pacific Bank, de California, e ilegalmente hicieron cargos a esas cuentas por aproximadamente 43 millones de dólares.
Para evitar su descubrimiento, los acusados usaron cinco cuentas comerciales diferentes, y cuatro personas jurídicas falsas. Cada vez que un emisor de tarjetas de crédito registraba un número excesivo de cargos y añadía la cuenta a la lista de comerciantes sospechosos, los acusados la cerraban y abrían una nueva.
Según se informó, los acusados manejaban un grupo de sitios web pornográficos, tales como AsianHQ, Erosisland.com y Restricted.com. Las cuentas de las víctimas fueron cargadas bajo los nombres de Netfill, N-Bill, MJD Service Corp., y Webtel.
Aparte de la sanción económica, el tribunal prohibió a los acusados ser propietarios o administrar cualquier negocio en el que se manejen tarjetas de crédito a futuro.