Según un artículo publicado en la revista Juventud Rebelde, Cuba se dispone a iniciar una transición gradual desde Windows a Linux en todas las entidades de la administración pública, a la vez que se comenzará a usar aplicaciones de código abierto.
Según la revista, el objetivo es eliminar la presencia casi exclusiva de Windows en las computadoras. La información indica que el anuncio fue hecho por Roberto del Puerto, director de la Oficina para la Informatización de la Sociedad, durante un taller sobre software libre.
El artículo indica que actualmente hay más de 1.500 usuarios de Linux en Cuba, y una importante comunidad de desarrolladores, y que la isla ya cuenta con una distribución propia de Linux, con aplicaciones especialmente adaptadas, mismas que fueron presentadas durante la conferencia.
La transición a Linux surge como resultado de un plan elaborado por la oficina dirigida por Puerto, y que contará con facultades organizativas, técnicas y jurídicas para asegurar una transición gradual y completa.
Con el fin de monitorear la implantación del plan se ha creado un grupo especial integrado por representantes de varios ministerios, otros organismos públicos y universitarios. Corresponderá al sector académico desarrollar software basado en Linux.