Mientras el primero estaría trabajando al cuarto año y percibiendo un sueldo aproximado de 800 mil pesos, el segundo recién generaría ese nivel de renta al séptimo año. En materia de costos, y según cifras del mercado, si bien los estudios de Técnico en Computación e Informática en un IP o CFT podrían significar un desembolso total de hasta $3,5 millones, el financiamiento completo de una carrera de Ingeniería Civil en Informática en una universidad podría alcanzar hasta los $24 millones, explica Benjamín Toselli, presidente ejecutivo de IT Hunter.
Es por eso que estudiar primero una carrera técnica vinculada a las TIC para posteriormente, y una vez trabajando, financiar estudios vespertinos de ingeniería es la recomendación que hace esta consultora a aquellas personas de clase media.
Esta estrategia de Movilidad Tecnológica se basa en el hecho de que la formación técnica es una manera rápida y efectiva para reinsertarse en el mercado laboral. Según datos entregados por el Presidente Piñera, en Chile falta formar 600 mil nuevos técnicos, en general, señala el directivo.
Asimismo, sostiene que dado el actual déficit de especialistas TIC en el país, seguir este tipo de estudios constituye una verdadera llave para emplearse en el corto plazo y acceder a sueldos que, cada día, son más atractivos.
Hoy, una de las principales ventajas de estudiar una carrera técnica en el ámbito tecnológico radica en que existe una gran oferta de trabajos en diversos sectores de la economía, lo que se traduce en un alto nivel de empleabilidad. De hecho, hay compañías que, incluso, han debido buscar especialistas en otros países, dado que en Chile no hay el número suficiente para satisfacer la demanda actual.
Asimismo, Toselli afirma que- como consecuencia de lo anterior- un nuevo paradigma ha surgido en materia de rentas para determinadas especialidades.
Si antiguamente los mejores sueldos del mundo TIC se concentraban en cargos de gestión, actualmente muchos especialistas de alto nivel han mejorado sus ingresos. Es decir, tienen rentas similares a los cargos de gestión.
El ejecutivo manifestó que otro de los atractivos de la formación técnica es que, a diferencia de las carreras universitarias, son más breves y económicas.
Entonces, este tipo de educación se traduce en una verdadera oportunidad para adquirir mayores conocimientos que permitan trabajar y acceder a un mejor nivel de vida sin endeudarse mucho e, incluso, para continuar perfeccionándose en el futuro, pues ya estarán generando ingresos propios.
La recomendación final de este ejecutivo, para las personas de clase media, consiste en cursar primero una carrera técnica para luego seguir con estudios vespertinos de ingeniería. El siguiente paso es estudiar inglés y, finalmente, un Magister.