Al respecto, Obama aseguró que “Nadie escucha conversaciones telefónicas específicas”, ya que el programa en sí no tiene tal cometido. El Presidente estadounidense dice haber sentido escepticismo frente al proyecto, iniciado durante la administración de George W. Bush, pero que finalmente había concluido que la iniciativa era necesaria para asegurar a Estados Unidos contra ataques terroristas.
Según Obama, es positivo que se produzca un debate donde se contraponga el interés por la seguridad nacional y el derecho a la privacidad. En tal sentido, considera importante tener presente que “Nunca será posible estar 100% protegido, y tener a la vez un 100% de privacidad; como sociedad, es necesario tomar algunas decisiones”.
El presidente estadounidense agregó que el Congreso y las autoridades judiciales estadounidenses han autorizado el sistema de vigilancia, por lo que éste opera en un marco legal.
La revelación inicial estuvo a cargo del periódico británico The Guardian, que informó como primicia que la organización de inteligencia NSA tenía pleno acceso a las llamadas telefónicas de millones de clientes de Verizon. Posteriormente, reveló que la agencia también tenía acceso a los servidores de empresas como Microsoft, Yahoo, Google, Facebook, PalTalk, AOL, Skype, YouTube y Apple. Varias de estas empresas se apresuraron a desmentir que las autoridades tuvieran acceso irrestricto a sus servidores.
Ilustración: Barack Obama (fotografía de Wikimedia Commons).