Las autoridades de Canadá, la Unión Europea, Australia, México, Nueva Zelandia, Israel y Suiza han dirigido una carta abierta a Google, donde plantean la necesidad de dialogar sobre los temas de protección de la privacidad que las gafas inteligentes de Google ponen de relieve.
Aunque Google no es la única empresa en ofrecer este tipo de productos, las citadas autoridades estiman que Google lidera el sector, por lo que será la primera en verse enfrentada a las disyuntivas éticas que un producto de tales características plantea.
Las autoridades firmantes indican que su intención no es tomar decisiones basadas en especulaciones, por lo que solicitan a Google responder una serie de preguntas, que incluyen las siguientes:
- En qué medida Googleglass cumple las normativas de protección de datos.
- Qué información ese recabada por Googleglass, y qué uso dará al Google a esta información, o en qué medida la compartirá con otras empresas.
- Reconocimiento de rostros a futuro.
- Medidas de protección de la privacidad adoptadas por Google y los desarrolladores de aplicaciones.
En la carta se indica que las directrices elaboradas por Google para los desarrolladores interesados en crear aplicaciones para Glass constituyen un primer paso positivo tendiente a identificar temas de protección de la privacidad. Habiendo dicho lo anterior, las autoridades recalcan la necesidad de dar más pasos en la misma dirección.
La medida Google ha considerado tales aspectos de su tecnología posiblemente quede de relieve en el siguiente vídeo, donde John Simpson, representante de la organización de protección al consumidor Consumer Watchdog, plantea dos preguntas concretas sobre la eliminación de fotografías publicadas en Google Glass. Simpson, de profesión periodista y director de Consumer Watchdog, ha dedicado especial atención a evaluar de forma crítica las actividades de Google.
En el encuentro, Simpson indica que Google Glass se convertirá en “en la herramienta soñada” para individuos y organizaciones interesadas en vigilar a los demás, fotografiándoles y filmándoles sin que estos se enteren. Luego, califica de hipocresía el hecho que Google haya prohibido a los asistentes al encuentro el uso de todo dispositivo de grabación audiovisual. Según Simpson, es inconsecuente que Google por una parte ofrezca herramientas que permiten vigilar a los demás, y que por otra parte sea tan celosa de su propia privacidad.
Específicamente, Simpson pregunta a Page si Google ofrecerá al público un sistema que le permita borrar fotografías captadas sin su autorización con dispositivos Google Glass, de la misma forma que el público tiene, en algunos países, la posibilidad de requerir a Google borrar imágenes de Google Street View.
El presidente de Google, Larry Page, evita responder de manera concreta las preguntas que se le hacen, señalando que es normal que la gente sienta preocupación ante nuevos productos que aún no alcanzan un alto grado de propagación. “Quisiera pedir a ustedes no crear temor ni preocupaciones por innovaciones tecnológicas que aún no han sido lanzadas”, señaló Page, recalcando que es importante que la gente primero los utilice y entiendan las consecuencias.
Simpson, por su parte, considera que Larry Page “simplemente no se entera” sobre las preocupaciones de privacidad relacionadas con Google Glass.
Ilustración: Captura de presentación de Google Glass.