Entre los diseños de chips presentados hoy por Arm se encuentra el Immortalis-G715, una nueva GPU móvil de gama alta. Está previsto que salga al mercado junto con los dispositivos móviles el próximo año. Según Arm, el chip puede superar a su anterior GPU de gama alta en un 15%.
La compatibilidad a nivel de hardware con los métodos de trazado de rayos es la característica de mejora del rendimiento de la G715 destacada por Immortalis. El trazado de rayos es una técnica de renderizado que mejora la fidelidad gráfica de los videojuegos. Dado que exige grandes recursos de procesamiento para ejecutarse, esta tecnología sólo era antes ampliamente soportada en las GPU de sobremesa.
La anterior GPU insignia de Arm también era compatible con el trazado de rayos. Sin embargo, sólo soportaba la tecnología a nivel de software, mientras que la nueva Immortalis-G715 admite mejoras de trazado de rayos a nivel de hardware. Según Arm, las mejoras permiten un aumento significativo del rendimiento.
“El trazado de rayos en el Immortalis-G715 sólo requiere un 4% del área del núcleo de sombreado, al tiempo que ofrece un aumento del rendimiento de más del 300% mediante la aceleración por hardware”, explicó Andy Craigen, director de gestión de productos de Arm.
La Mali-G715, otra nueva GPU para móviles de gama alta, se une a la Immortalis-G715 en la familia de las Immortalis-G715. La Mali-G715 es compatible con el sombreado de tasa variable, una tecnología de renderizado que puede aumentar la velocidad de los fotogramas de los videojuegos al tiempo que mejora la eficiencia energética. Según Arm, el chip supera a su predecesor en términos de rendimiento y eficiencia energética en un 15%.
Mejoras en la CPU
El Cortex-X3 es la nueva CPU móvil insignia de Arm, que puede alimentar tanto teléfonos como portátiles. Cuando se coloca en un teléfono inteligente o una tableta, la CPU supera a los chips Arm de la generación anterior hasta en un 25%. Cuando alimenta una computadora portátil, el Arm Cortex-X3 puede ejecutar aplicaciones un 34% más rápido.
El Arm Cortex-X3 no es una CPU completa, sino un núcleo de CPU, que es el componente informático fundamental en un procesador que realiza los cálculos. Los procesadores móviles suelen tener varios núcleos. La memoria, por ejemplo, es uno de los componentes de apoyo.
Arm está lanzando la tecnología DSU-110 junto con su diseño de CPU Cortex-X3 para ayudar al desarrollo de los procesadores móviles. Los fabricantes de chips pueden utilizar la técnica para fusionar hasta 12 núcleos Cortex-X3 en un único procesador. El DSU-110 permite dotar a las CPU de hasta 16 megabytes de caché L3, una especie de memoria de alta velocidad utilizada por los procesadores para almacenar los datos sobre los que se realizan los cálculos.
“En comparación con la generación anterior, el DSU-110 recién mejorado admite un 50% más de núcleos, junto con las últimas capacidades ISA”, declaró Saurabh Pradhan, director senior de gestión de productos de Arm, en una entrada de blog. “Estas mejoras aumentan la flexibilidad para nuestros socios y proporcionan los recursos necesarios para dar rienda suelta a todo el potencial de nuestras CPU para mejorar las experiencias de los usuarios”.
Arm presenta el Cortex-A715, un nuevo diseño de CPU para dispositivos móviles que requieren un equilibrio entre rendimiento y ahorro de batería. Consume un 20% menos de energía que su predecesor, el Cortex-A710. El nuevo chip también promete mejorar el rendimiento en un 5%.
Muchas CPUs móviles combinan núcleos rápidos con otros más lentos y eficientes, diseñados para maximizar la duración de la batería. Para maximizar el rendimiento, los programas de cálculo intensivo funcionan en núcleos de alta velocidad. Para ahorrar energía, los programas menos exigentes se instalan en la región más eficiente de la CPU.
Arm proporciona un diseño de semiconductor personalizado que las empresas pueden emplear para fabricar los núcleos de bajo consumo de una CPU móvil. El diseño del chip Cortex-A510 debutó el año pasado. Arm ha anunciado una versión mejorada del Cortex-A510 con un aumento del 5% en la eficiencia energética.
Las últimas CPU de Arm incluyen dos características de ciberseguridad destinadas a reducir el peligro de los ciberataques. La primera mejora restringe la capacidad del malware para acceder a la memoria de un dispositivo. MTE asimétrico, la segunda nueva característica de seguridad, detecta y rechaza ciertos tipos de ciberataques que pretenden sobrescribir los datos de un dispositivo con código malicioso.
“La MTE asimétrica proporciona una mayor flexibilidad en cuanto a la velocidad, la precisión y la focalización de estas debilidades de seguridad”, declaró Pradhan. “Esto ayuda al desarrollo de software al permitir aplicaciones más robustas, al tiempo que permite una mayor difusión de la MTE en todo el ecosistema”.
Ilustración: fotograma, video de presentación del chip Immortalis.